Tal vez tu vida cotidiana te estresa. Aquí algunos tips que te ayudaran a tener equilibrio entre tu vida
laboral y familiar:
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Lleva un registro.
Anota todo lo que hagas durante la semana. Analiza tus patrones y decide qué puedes eliminar, delegar o manejar mejor.
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Organiza tu tiempo.
Maneja las tareas domésticas con eficiencia y lleva un calendario familiar de fechas importantes.
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Elimina los malentendidos que quiten tiempo.
Comunícate con claridad y escucha con cuidado. Toma notas si te resulta útil.
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Cuídate.
Trata de apartar cierto tiempo de cada día para una actividad que disfrutes como leer, ejercitarte o escuchar música.
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Aparta una noche por semana para diversiones.
Busca actividades que puedas realizar con amigos o familiares, como algún juego o salir a caminar.
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Protege tu día libre.
Programa algunas tareas rutinarias para los días de trabajo, de manera que tus días libres sean más relajantes.
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Duerme suficiente.
No hay nada tan estresante ni potencialmente peligroso como trabajar cuando no has dormido lo suficiente.
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Refuerza tu sistema de apoyo.
Habla con un amigo o compañero de trabajo de confianza durante los momentos de
estrés y dificultades.
